En plena montaña de Covadonga hay maravillosos lugares no muy concurridos, como pueden ser las vegas y majadas comprendidas entre el Real Sitio y Los Lagos Enol y La Ercina, entre ellas destacan las de Orandi, Comeya, Moroñes, Fana, Teón y Tarañodios.
De todas las vegas y antiguas majadas de pastoreo comprendidas entre Covadonga y Los Lagos Enol y La Ercina, destacan por su belleza las de Fana, Teón, Orandi y Comeya, siendo esta última la más extensa y recóndita. Además de poco frecuentada por los excursionistas. Soñín y Moroñes están más apartadas, lo mismo que las de Severín, La Frecha o Tarañodios.
Se piensa que antiguamente nuestros valles glaciares pudieron ser grandes lagos. Esos cuencos o "dolinas" suelen secarse, cuando el material arcilloso de su fondo (que les hace impermeables) desaparece por causas naturales o artificiales. Las grietas, fallas o sumideros, se forman muy fácil en la roca caliza, por donde se escapa el agua. Los Picos de Europa y la Cordillera Cantábrica, se van quedando poco a poco sin sus lagos, por este y otros motivos (mineros, ganaderos,...). La vega de Comeya, situada en el macizo occidental de los Picos de Europa (otrora Parque Nacional de la Montaña de Covadonga) es uno de estos lagos hoy ya desecado casi completamente. Es una formación geológica denominada poljé. En esa vega, dada su humedad, abunda el trébol de agua. Para acceder a este bello lugar, hace unos años muy castigado ecológicamente por las explotaciones mineras de Bufarrera, se pueden tomar varios itinerarios, todos ellos de corta duración. Los principales son estos:
· Entre los kilómetros 5 y 6 de la carretera de Covadonga a Los Lagos, en el valle de La Huesera y Caña Valles, sale una pista de tierra, que antaño servía como acceso para los vehículos de las explotaciones mineras citadas. La senda conduce en poco más de una hora, a paso tranquilo, hasta la vega de Comeya, siguiendo la dirección Este. La pista asciende primero suavemente, hasta el collado Uverdón. Quedándonos a la izquierda el Cantu El Utre y a la derecha la Peña del Elefante, así como el Mirador de la Reina. El descenso a la amplia vega de Comeya, desde el collado Uverdón se hace rápidamente por ese marcado camino. Al comienzo de la pista, en Caña Valles, esta se bifurca a los pocos metros, tomando nosotros el ramal de la derecha (el que va al Este) pues el ramal de la izquierda sube, en dirección Norte, hasta un comedero artificial para aves carroñeras. Por eso no es nada raro ver en esta zona muchos buitres.
· Entre los kilómetros 8 y 9 de la carretera de Covadonga a Los Lagos, se encuentra la vega de Teón, con una majada que aún conserva sus cabañas en buen estado. Encima de esta hermosa vega esta la Peña del Elefante (al Norte) y al otro lado de esa montaña queda la vega de Comeya. En Teón se puede coge fácilmente un camino que va a Comeya, pasando primero al lado de una fuente y descendiendo en poco más de media hora. Aunque hay que tener cuidado por el sendero, especialmente con las piedras sueltas o si hay barro. Todo el tiempo tendremos Comeya a la vista y sólo procuremos no salirnos del sendero. Y al llegar a la vega no meterse en la zona enfangada o "llamarga" (aquí se conoce a las zonas húmedas así, y a la laguna, como Tremedal o Tremas). Hay que ir en dirección Sur, hacia el sumidero del riachuelo que surca esta vega. Desde Teón también se va en poco tiempo a Fana y Moroñes y con buen guía hasta Orandi...
·
Desde el
desagüe del lago Enol se puede descender por "El Escaleru" y cueva del "Furacón"
hasta Comeya, llegando primero a la majada del mismo nombre y después a la
amplia vega. En dirección norteña y en poco más de media hora.