Una de las muchas sierras que hay en Asturias, casi desconocida por montañeros y excursionistas, es Buanga o Güanga, situada en el concejo de Oviedo, en el límite con Santo Adriano, Grado y Proaza. Esa pequeña montaña se alza sobre el valle del Trubia. Entre San Andrés, Castañedo del Monte, Linares, Sama de Grado y Perlavia. El acceso a Güanga se puede hacer por esos cinco pueblos.
Por montes y valles de Asturias quedan restos de calzadas romanas, que, al no estar catalogadas oficialmente por los responsables culturales del Principado, suelen destruirse al trazar sobre ellas pistas o carreteras. Y, lo que duró en la Naturaleza siglos, ahora, por desidia o ignorancia, desaparece en unos días (repetimos una vez más para los "oídos sordos").
Aún se pueden ver restos de esas vías romanas, con su empedrado original, o algo reformado y las armaduras y contrafuertes de la calzada, así como algún puente, en muchos lugares, pero en concreto en el concejo de Oviedo hay restos de tres de ellas, que según parece podrían ser restauradas por el ayuntamiento de la capital. El Gobierno del Principado también puede hacer algo en este sentido, dado que en los últimos años se hizo todo lo contrario, por desgracia.
Esos tramos de vías romanas o caminos reales por el concejo ovetense están en la Calzada de La Carisa, que iba cerca del Puerto Pajares, por los montes de igual nombre, entre Busdongo y Mieres de Camino (en realidad unía la capital leonesa y la capital asturiana, entonces Lugo de Llanera, pasando por la actual Oviedo). Tenía un ramal importante a Gijón y hay restos de ella por la sierra de Carrocéu, límite de Aller, Lena y Mieres. Pasa por Olloniego, Venta del Aire y La Manjoya. Con vestigios de fortalezas, ventas, capillas y puentes.
Otra es la Calzada de La Mesa, en su ramal principal a Gijón (entre el río Nora y el Nalón, por Gallegos y Brañes); con restos de la vía y puentes y ventas, o antiguas fortalezas... Y la otra es también por el Camín Real de La Mesa (un tramo continuación del anterior) entre Linares, cerca de Castañedo del Monte; y Perlavia ("Por La Vía") o Sama de Grado, por tierras ovetenses y en los límites de los concejos de Santo Adriano y Grado. El ramal de Linares a Trubia además de pasar por Perlavia, cruza la sierra de Buanga (Güanga) donde hubo un castillo o fortaleza (antiguo castro) en Peña Castillu. Y hay restos del camino y una bella cascada en medio de un castañeu.
Para visitar Buanga (monte, antiguo castillo, cascada o restos de la calzada) aconsejamos salir del pueblo de Perlavia, al que se llega por Trubia o Sama de Grado. El paseo por el antiguo camino real es fácil y se hace en menos de una hora hasta la bella cascada que forma el río Güanga (afluente del Trubia). El regreso se puede hacer por el mismo camino o un poco más alto por el que une Linares y Sama de Grado (el verdadero camín real). Y por San Andrés de Trubia. Cualquiera es cómodo de hacer, si nos orientamos bien. En Perlavia los lugareños son muy amables. El bosque de castaños y las hermosas vistas reconfortan de la corta caminata, aunque, a veces, con el camino muy embarrado.
En medio del castañeu y cerca de la cascada de Güanga hay restos de un ancestral molino, muy interesantes. En lo alto está la Peña del Castillo, del que ya no quedan ni ruinas, pues como las losas de la calzada romana, se emplearon con el paso de los siglos para construir cabañas o murias de separación de prados y caleyes. El castillo citado es mencionado en la Crónica de Alfonso El Emperador, cuando narra la rebelión del conde Gonzalo Peláez, en 1132 y dice que "permaneció rebelde en Proaza, Buanga y Alba de Quirós, que eran castillos fortísimos"... En la zona hay excelentes vistas del valle del Trubia y del Aramo.