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Calzada de Mestas de Ardisana o PiedrafitaJovellanos pasó varias veces por una importante vía histórica que unía la costa de Llanes con Cangas de Onís y CovadongaDecía Jovellanos el 27 de setiembre de 1790: "Camino por el puerto de Piedrafita; antes se sigue la orilla del río de San Antolín de Bedón, coronada de verdes y bellísimos alisos; el puerto bastante alto; camino áspero, de calzada en gran parte desigual, de piedras durísimas y bastante pendiente; a la izquierda montañas elevadísimas, ovejas pastando en la más alta cima, y como colgantes de ella, cabras, más abajo vacas; sus senderos estrechísimos; los pastores en algún pequeño rellano lejos de los rebaños; robles viejísimos en la rápida pendiente; algunos abatidos por su peso, cortado después su tronco, renacidos de la parte de su raíz pegada a la tierra, y de sus retoños otros robles altísimos, levantados hasta el cielo. Hayas altísimas, derechísimas y muy frondosas; abedules gigantes; bajada a Corao; vese los lugares de Mestas e Intriago...".
Este pueblo que cita Jovellanos, en su célebre Diario, es Mestas de Cangas, pues, el otro Mestas, el llanísco (el de Ardisana) está cerca de Riocaliente, de donde se sigue a la aldea de Telledo (Telléu) y la orilla del río Piedrahita, donde pueden verse antiguos molinos de agua, cabañas de pastoreo y las armaduras se la calzada romana. Luego se sube hasta donde había una antigua venta, cerca de la majada de La Trapa, para llegar al collado de Vega del Puertu o Pandu El Arbol (Ventosu). La bajada, siguiendo la ruta señalizada de Llanes a Covadonga (Camín de La Reina, o de Francia), es hasta la aldea de Cuerres. Después se va, o bien por la carretera a Llenín y Villaverde (con su vieja iglesia recién restaurada) y a Corao; o se podría hacer una variante por el Colláu Ventosu, o loma del Arbol, hacia San Martín de Grazanes y Beceña… Tras llegar a Llenín, donde se puede ver funcionando aún el famoso molino de Nevares (que parece ser visitó Jovellanos), se puede ir a Taranu y Labra; y de allí a Corao, en otra nueva variante. Un ramal de esta calzada, en Cuerres, iba por Bustovela, hacia Igena y Zardón (en esa ruta hay algunos tramos empedrados). De Mestas de Ardisana a Corao, igual si se va por un lado que por el otro (carretera, pistas o sendas) la marcha a pie es de unas 4 horas, a ritmo suave. Por los montes asturianos cruzaban más de una treintena de vías romanas que, al no estar catalogadas oficialmente, en la mayoría de los casos suelen destruirse al trazar sobre ellas pistas o carreteras; y lo que duró en la Naturaleza siglos, por desidia o ignorancia puede perderse en unos días al pasar por allí pesada maquinaria. La maleza también suele ocultar y deteriorar esos caminos. Aún se pueden ver restos de esas vías históricas, con empedrado original (o algo reformado) y las armaduras de la calzada, los "llantones" y algún puente, en varios lugares, muchos de ellos del Oriente de Asturias, como el citado. Una fácil caminata por una de estas calzadas es la que relatamos anteriormente y que comienza en Mestas de Ardisana y finaliza en Llenín o Corao, pasando Telléu, Vega Puertu, Mayau Panizu (o La Trapa, o Colláu Ventosu) y la aldea de Cuerres, cerca de Llenín… Subir desde Mestas al Collaú Ventosu (o Piedrafita, pues había allí un “jitu” que limitaba tierras de Cangas de Onís, Onís y Llanes), se hace en poco más de una hora y podemos ver restos de la calzada romana, aunque muy abandonados.
En realidad está vía histórica era una continuación de la que venía de tierras cántabras de La Liebana, desde Sotres y Tielve, por los Puertos de Era, en el concejo de Cabrales. Por allí pasaba antaño una importante calzada romana, llamada de Caoro, de la que aún se conserva gran parte del empedrado. La calzada de Caoro tenía su continuación hacia el Sur, por las Vegas de Sotres, Aliva y La Liebana; y hacia el Norte, por el valle cabraliego, para seguir, tras dejar Ortiguero a un lado (y un ramal a Llanes), por La Puente Cima, Riocaliente y Mestas, al Valle Ardisana (y río y puerto Piedrafita) hasta Llenín, Corao y Cangas de Onís, en el llamado Camín de Llanes a Covadonga. Se pueden ver puentes romanos entre Ortiguero y La Herrería (sobre el río Les Cabres está el pequeño Puente Cima, entre otros). Esta antigua vía se conoce por los llaniscos como el Camín de Covadonga… Y además de Jovellanos, que lo cruzó varias veces, se cree que pasaron por allí ilustres personajes.
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